Murió Jules Bianchi tras estar casi 10 meses en coma a consecuencia del accidente que sufrió ese 5 de octubre del 2014 en la vuelta 42 del Gran Premio de Japón.

No es normal que un auto choque con una grúa. Pero nadie recuerda lo que pasó en el Gran Premio de Europa del 2007, tras ese diluvio que hubo en la largada y que produjo un río en la primera curva. El auto de Scott Speed se fue derecho a la trampa de grava y justo había una grúa, la cual fue de forma indirecta como una contención. Nadie en esa época criticó o exigió cambios en la seguridad, ¿la razón? “Fue algo trivial”.

El único que concientizó con la situación fue Martin Brundle durante la transmisión de ese Gran Premio para la TV Británica.  Otro ejemplo es esa carrera de Fórmula Masters en Alemania en la cual uno de los autos chocó contra uno de los autos médicos pero nadie hizo nada, ¿porque? “por qué eran unos novatos”.
La forma en la que la FIA se lavó manos post accidente de Bianchi fue descarada ¿pero nadie alguna vez pensó que pasaría eso algún día? a mi nunca se me pasó en la cabeza que eso pasaría, más en un Gran Premio de Fórmula 1.

“Es una locura dejar algo o alguien ahí hasta que neutralicen la carrera, porque todo estará llegando en sentido contrario y tu no quieres estar debajo una de esas retroexcavadoras.” – Martin Brundle durante el Gran Premio de Europa del 2007 para el canal ITV de Reino Unido.

La hipocresía de algunos periodistas es innecesaria. Destrozando a la FIA, Charlie Whiting, a los del circuito de Suzuka, a los comisarios, pero en el pasado ellos mantuvieron sus bocas cerradas y ahora esas mismas personas ahora están tomando la batuta en cuanto a seguridad. Siendo que prefieren criticar el sonido de los motores, la organización, el manejo del deporte, ¿pero la seguridad? bien, gracias.

La muerte de Jules es un recordatorio para todos nosotros de que el automovilismo nunca será 100% seguro por mas que pasen 10, 20, 30, 40 años sin fatalidades.

No estoy defendiendo a la FIA pero mucha gente olvida esas situaciones anteriores, ¿fue una negligencia eso? Sí, pero han pasado un sinfín de situaciones de ese tipo y nadie alzó la voz.

Ojalá, pero ojalá que nunca más vivamos estas situaciones, ojalá que ahora si se aprendan las lecciones, para que nunca más perdamos a otro piloto, para que nunca más veamos hipocresía por parte de ciertas personas.