NASCAR: La gloria y la caida de Stewart-Haas

El martes 28 de mayo se anunció el bombazo (esperado) de que Stewart-Haas Racing cerraría operaciones luego de finalizar 2024. Su palmarés de 69 victorias y dos títulos en la Copa NASCAR, 26 victorias y un título en la Xfinity Series, y una victoria en la Truck Series son un gran logro para el relativamente poco tiempo que compitieron en NASCAR, en comparación con equipos más antiguos como Hendrick, Joe Gibbs, Roush o Penske.

Hay que remontarnos 16 años atrás para encontrar la alianza entre Tony Stewart y Gene Haas, siendo oficial el 10 de julio de 2008 el cambio del nombre del equipo. Por un lado, Gene Haas, un empresario que hizo millones como fabricante de herramientas de maquinaria, fundó Haas CNC Racing en 2002. Este equipo competía en la Copa NASCAR como equipo ‘satélite’ de Chevrolet, teniendo acceso a los coches, motores y soporte técnico de Hendrick, aunque sin destacarse en los resultados. Mientras tanto, Tony Stewart logró dos títulos en la categoría con autos de General Motors con Joe Gibbs Racing. Sin embargo, el cambio de dicho equipo a Toyota en 2008 hizo que Stewart quisiera volver a Chevrolet, asumiendo el rol de piloto/copropietario a partir de la temporada 2009 de la Copa NASCAR y pasando a conducir un auto renumerado con el número 14 como homenaje a su ídolo, A.J. Foyt.

Stewart ya tenía experiencia como propietario de un equipo de carreras, habiendo puesto coches en pista en diferentes competiciones de tierra de la USAC, donde sus pilotos ganaron títulos en diversas divisiones como Silver Crown y Sprint Car. Incluso Tony Stewart fue copropietario de un equipo de la Indy Racing League llamado Tri-Star Motorsports, junto con Larry Curry y Andy Card. Stewart, Curry y Card fundaron el equipo en 1999, y hasta 2000, Stewart participaba activamente en la gestión del equipo, llegando a ser jefe de mecánicos y cambiador del neumático delantero para el segundo auto del equipo. Incluso en la Indy 500 del 2000, Stewart se disfrazó para probar el auto de Schroeder y mejoró su configuración, ayudando a Schroeder a calificar 29º y terminar 14º en la carrera. Pero a finales de ese año, Stewart vendió su parte del equipo. Posteriormente, se descubrió que Larry Curry había cometido fraude, lo cual llevó al colapso de Tri-Star Motorsports.

Era Stewart

Haas CNC Racing se transformó en Stewart-Haas Racing, manteniendo la marca Chevrolet y la alianza con Hendrick Motorsports, pero cambiando radicalmente sus pilotos. Pasaron de tener dos autos, uno con Scott Riggs y el otro con una rotación de pilotos entre Jeremy Mayfield, Johnny Sauter y Tony Raines, a contar con Tony Stewart y Ryan Newman, este último proveniente de Penske Racing. Este cambio también influyó en la atracción de patrocinadores como Office Depot, Old Spice, Burger King y U.S. Army.

El cambio tuvo efecto inmediato, ya que en 284 carreras entre 2002 y 2008, los autos de Haas CNC Racing solo lograron un top 5 y 14 top 10. En contraste, solo en 2009, Stewart y Newman lograron cuatro victorias, 20 top 5 y 38 top 10, con Stewart obteniendo todas las victorias del equipo. La primera victoria del equipo fue cuando Stewart ganó la Carrera de las Estrellas de 2009, que fue la primera victoria para Gene Haas, aunque se trataba de una carrera de exhibición. No fue hasta la fecha 14 del campeonato que Stewart consiguió la primera victoria puntuable para el equipo en la carrera primaveral de Pocono, la «Pocono 500», siendo el primer piloto-propietario en ganar una carrera en la Copa NASCAR desde Ricky Rudd en 1998. Pero no fue hasta la tercera temporada dónde ocurriera el gran logro.

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La temporada regular de 2011 fue complicada para Tony Stewart, sufriendo altibajos y no ganó ninguna carrera en las primeras 26 carreras, pero logró clasificarse al Chase for the Cup en noveno lugar. Sin embargo, Stewart se mostró muy crítico con el rendimiento de su equipo, llegando incluso a cuestionar su merecimiento de estar en el Chase debido a su bajo desempeño.

Pero hubo un cambio de rumbo durante el propio Chase, en la que Stewart y su equipo #14 ganaron cinco carreras de las 10 de dicha etapa. En la mitad del Chase, Stewart estaba quinto en la clasificación, 24 puntos detrás del líder e incluso se anunció la salida de su jefe de equipo, Darian Grubb, quien no continuaría en 2012. Pero esa no fue una distracción y Stewart ganó el campeonato, asegurándolo gracias a su ventaja en el desempate por número de victorias sobre Carl Edwards (5 contra 1). Esta victoria incluyó un triunfo épico en la última carrera en Homestead-Miami, superando problemas significativos como daños en la parrilla de su auto. Este era el tercer título de Stewart en la Copa NASCAR y se convierte en el primer piloto-propietario en ser campeón de la categoría desde Alan Kulwicki en 1992.

Era Harvick


En 2013, Stewart-Haas se expandió a tres autos a tiempo completo y en 2014 a cuatro, manteniéndose así hasta el final de ese año. Tony Stewart comenzó a perderse carreras: en 2013, debido a un accidente en una carrera de Sprint Cars donde se rompió tanto la tibia como el peroné de su pierna derecha; en 2014, porque atropelló accidentalmente a Kevin Ward Jr., otro competidor en una carrera de la Sprint Cars, lo que le ocasionó la muerte a Ward; y en 2016, año de su retiro, debido a un accidente con un buggy que le lesionó la espalda. Ese año se retiró, logrando su victoria número 49 y última en la Copa NASCAR en Sonoma. Ryan Newman dejó el equipo después de 2013, con un total de cuatro victorias. Danica Patrick fue la primera en ocupar el tercer auto a tiempo completo, pero en sus cinco temporadas completas no pasó del puesto 24 del campeonato.

Para 2014, llegaron dos fichajes de renombre: uno fue Kurt Busch, que provenía de un gran rendimiento con el equipo Furniture Row, transformando a dicho equipo en el primer equipo de un solo auto en meterse al Chase. El otro fue Kevin Harvick, quien marcaría la historia gloriosa de Stewart-Haas, procedente de Richard Childress, equipo con el que debutó en 2001 y permaneció hasta 2013.

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Además de la llegada de Harvick, también se incorporó uno de los mejores jefes de equipo del siglo en la NASCAR, Rodney Childers, que entre 2009 y 2013 trabajó para Michael Waltrip Racing, logrando que David Reutimann consiguiera dos victorias, que Mark Martin disfrutara de cinco top 10 y que Brian Vickers ganara su tercera victoria en la Copa NASCAR. La dupla de Kevin Harvick como piloto y Rodney Childers como jefe de equipo fue un éxito, manteniéndose fija en todas las temporadas hasta el retiro de Harvick en 2023. En su primera temporada, Harvick logró cuatro victorias en Darlington, Charlotte y ambas carreras de Phoenix, alcanzando la ronda final. Harvick ganó la carrera final en Homestead, manteniendo a raya a Ryan Newman, y de esta forma se coronó campeón por única vez de la Copa NASCAR, siendo el segundo título de pilotos para Stewart-Haas.

Harvick fue el pilar del equipo, terminando entre los cinco primeros en siete de sus primeras ocho temporadas en Stewart-Haas. En esas primeras ocho temporadas, llegó a conseguir más de cuatro victorias en cinco temporadas y a liderar más de 1500 vueltas en cuatro temporadas, alcanzando más de 2000 en sus primeras temporadas, siendo 2294 en la segunda la mayor cantidad para Harvick.

Aun así, Harvick no pudo ganar otro título, siendo lo más cercano el segundo puesto en el campeonato de 2015 con 23 top 5, detrás de Kyle Busch, quien hizo su regreso para ganar el título a pesar de disputar solo 25 de las 36 carreras. Cabe mencionar que el avance de Harvick para disputar el título fue polémico, ya que en la tercera y última carrera de la segunda ronda, la ‘Contender Round‘, Harvick tenía problemas de transmisión y en el último reinicio perdería muchas posiciones y arriesgaría perder la chance de definir el título. Entonces, Harvick se tocó con Trevor Bayne y generó un accidente múltiple. Con esto, Harvick quedó en zona de clasificación a la siguiente ronda, ya que las reglas de ese momento indicaban que los reinicios ‘Green-White-Checkered‘ serían los únicos disponibles. Esta situación generó críticas de sus colegas, incluido el propio Bayne, quienes afirmaban que Harvick provocó el accidente a propósito para asegurar su pase a la siguiente ronda del Chase.

En 2017, Stewart-Haas cambiaron de la marca Chevrolet a la marca Ford, después de pasar toda la iteración del equipo desde 2002 con autos de la marca de General Motors. En la primera carrera, el equipo logró ganar las 500 Millas de Daytona, de la mano de Kurt Busch. Se puede considerar que Tony Stewart finalmente cumplió su asignatura pendiente al ganar esa carrera, aunque sea como propietario de equipo, ya que como piloto ganó muchas veces en Daytona en NASCAR Xfinity, Copa NASCAR e IROC, pero nunca las 500 Millas de Daytona.

En 2018, se puede calificar como el mejor año de Stewart-Haas en términos generales, porque los cuatro autos fueron rápidos, sumando entre ellos 3305 vueltas lideradas, con Kevin Harvick destacándose sobre sus compañeros de equipo, siendo tercero en el campeonato con 8 victorias y 23 top 5. Este es el único año en que los cuatro pilotos de Stewart-Haas ganaron al menos una carrera: Clint Bowyer logró dos, Kurt Busch y Aric Almirola lograron una cada uno, y los cuatro pilotos finalizaron en el top 12 del campeonato. Harvick llegó al ‘Championship 4′ y terminó tercero en el campeonato, mientras que Almirola, Busch y Clint Bowyer llegaron hasta la ‘Ronda de 8’, finalizando en 5°, 7° y 12° lugar respectivamente. De hecho, en la carrera de playoffs en Talladega, que a la postre fue ganada por el piloto de Stewart-Haas, Aric Almirola, los cuatro autos del equipo estuvieron tan al frente y siendo superiores al resto de la parrilla, que se llegó a decir que estaban «jugando al NASCAR 2006: Total Team Control», un videojuego conocido por permitir cambiar de compañero en plena carrera.

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La última gran temporada de calibre de campeonato para un piloto de Stewart-Haas fue en 2020, de la mano de Harvick, quien ganó 9 carreras, incluyendo el regreso de la actividad de la NASCAR sin público por la pandemia, y obtuvo un total de 20 top 5. Sin embargo, en la tercera ronda de los playoffs se descalabró. Fue segundo en Kansas, detrás de Joey Logano, debido al aire sucio del paquete de óvalos intermedios que impedía adelantar. Después vino un accidente en Texas y un intento fallido y desesperado de ‘Bump and Run‘ a Kyle Busch en Martinsville, que terminó con Harvick trompeando y eliminándose de la contienda por el título.

Declive


Volviendo a la temporada 2020, SHR logró meter a sus cuatro pilotos en los Playoffs (Harvick, Bowyer, Almirola y Custer), pero en 2021 solo metieron a dos (Almirola y Harvick), al igual que en 2022 (Chase Briscoe y Harvick). En 2022, se dieron las últimas tres victorias del equipo con Briscoe ganando en Phoenix, mientras que Harvick ganó en Michigan y Richmond, siendo esta última la victoria número 60 para Harvick, quien logró 36 de estas para Stewart-Haas.

En 2023, llegamos a la primera temporada en la cual ningún piloto del equipo logró ganar una carrera. Stewart-Haas solo clasificó a un piloto para los playoffs, Harvick. Para acentuar aún más el declive, no solo quedó eliminado en la primera ronda, sino que la forma en que ocurrió fue sorpresiva. Harvick llegó 12° en la tabla de pilotos a la carrera nocturna de Bristol, la última carrera de la primera ronda, con una ventaja de siete puntos sobre el 13°, el primer puesto de eliminación. Durante la carrera, Joey Logano, quien llegó 11°, abandonó debido a un accidente múltiple, lo que significaba que Harvick necesitaba solo realizar una carrera decente para avanzar. Sin embargo, la carrera fue tan desastrosa para Harvick, que terminó 29°, cinco vueltas detrás del líder por puro ritmo. Incluso un auto de Rick Ware conducido por J.J. Yeley, equipo y piloto tradicionalmente de zona baja de la grilla, terminó por delante de Harvick. Esto marcó la eliminación y la pérdida de la única oportunidad de Stewart-Haas de progresar en los Playoffs, una muestra más clara del espiral negativo del equipo.

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En los últimos años, el equipo ha perdido pilotos de jerarquía como Kevin Harvick, quien se retiró como piloto en 2023; Kurt Busch; y Clint Bowyer, quien se retiró en 2020. Entre estos 3 pilotos acumularon 104 victorias en la máxima división. Además, otros de sus pilotos, Aric Almirola, quien planeaba retirarse como piloto de la Copa NASCAR en 2022, tuvo que posponer su retiro por un año debido a su fiel patrocinador, Smithfield. Actualmente, su alineación de la Copa NASCAR, entre Chase Briscoe, Noah Gragson, Josh Berry y Ryan Preece suman sólo una victoria entre la máxima división. También experimentaron una sangría de importantes patrocinadores, como Monster Energy, Five Hour Energy, Smithfield Foods, Rheem y Busch Beer.

Kevin Harvick comentó durante la última Carrera de las Estrellas, donde participó como piloto de Hendrick al calificar el auto de Kyle Larson, que en Stewart-Haas Racing no existe una cultura de trabajo tan sólida como la que hay en equipos como Hendrick, destacando la importancia de la estructura y el liderazgo.

«Lo que más destaca para mí sobre Hendrick Motorsports en general es que realmente funciona como parte de una estructura organizada de cómo fluyen las cosas y a quién te diriges. Simplemente, la profundidad tanto del lado comercial como del lado de las carreras es notable. Eso es bastante revelador, solo la estructura en su totalidad. Y me gusta la estructura. Es algo que ha sido bueno ver. En Stewart-Haas Racing, tuve un grupo muy especial de personas que tuvieron éxito en una estructura que no era tan organizada como la que tenemos aquí en Hendrick en esta situación. Tuve mucho éxito en Stewart-Haas Racing, y estoy muy orgulloso de todas las cosas que hicimos y amo las relaciones que tenemos, pero es simplemente diferente, culturas muy diferentes.» – Kevin Harvick

Tony Stewart y Gene Haas tuvieron disputas de poder para decidir qué pilotos ocuparían los asientos disponibles. En 2019, Stewart quería mantener a Daniel Suárez, pero Haas impuso su decisión de colocar a Cole Custer, hijo de Joe, en lugar de Suárez. Tres años después, la situación se repitió, pero con diferentes personajes y un ganador distinto: esta vez, Tony Stewart logró colocar a Ryan Preece en el asiento de Custer, quien era el candidato de Haas.

También Stewart-Haas pudo haberse reforzado con otros pilotos, pero no se dieron las circunstancias. Tony Stewart quería a Kyle Larson en su equipo para la temporada 2021, pero según Stewart, Ford se negó a aceptarlo. Larson estaba en rehabilitación después de proferir un insulto racista en un directo de iRacing, lo que interrumpió su actividad en NASCAR. Sin embargo, en 2021 volvió a la Copa NASCAR de la mano de Hendrick Motorsports y, para colmo, ganó el título de forma dominante con 10 victorias. En 2022, Kyle Busch estaba disponible para la temporada 2023 ya que dejaba el equipo Joe Gibbs Racing, pero terminó recalando en Richard Childress Racing. Kevin Harvick mostró su desazón y llegó a decir que Stewart-Haas debería haber sido más agresivo en contratar a Kyle.

Tampoco se puede obviar los cruces que ha tenido Tony Stewart con la NASCAR en estos últimos cuatro años. Una de las pistas de la que es propietario Stewart, Eldora Speedway, tenía una prueba fija de la NASCAR Truck Series desde 2013 hasta 2019, con el Eldora Dirt Derby, significando el regreso de una serie nacional de NASCAR a las carreras de tierra desde 1970. La pandemia llegó y Eldora no formó parte de 2020, pero Tony Stewart rompió el acuerdo para que la carrera siga siendo parte de la Truck Series. Stewart se sintió molesto al ver que la carrera de tierra de la Copa NASCAR sería en el transformado Bristol Motor Speedway y no en Eldora, cuando Stewart hizo mucha inversión y lobby para intentar lograr esa fecha. Al confirmarle la NASCAR que Eldora no estaba en los planes de la Copa NASCAR, Stewart rompió el acuerdo. Por otro lado, Stewart quería participar en el Clash de Daytona 2021, pero fue ignorado cuando pregunto por si era elegible para participar en este evento.

Pero para Tony Stewart, lo más problemático fueron las penalizaciones a su equipo durante la implementación del coche Next-Gen en la Copa NASCAR entre 2022 y 2024. Stewart-Haas perdió 319 puntos y fue multado con $350.000 dólares por infracciones técnicas en sus coches. Además, Kevin Harvick fue descalificado del segundo lugar en Talladega 2023 debido a problemas con los sujetadores de los parabrisas. En abril de 2023, en el podcast «The Kenny Conversations» de Kenny Wallace, Tony Stewart expresó su descontento con el proceso de la NASCAR con las penalizaciones técnicas por infracciones a los coches, en torno a la ocasión en que los cuatro autos de Hendrick fueron penalizados por hood louvers en Phoenix, pero luego la sanción fue anulada, y en Richmond, los pilotos de Hendrick, Alex Bowman y William Byron, perdieron 60 puntos por modificar el greenhouse. Lo que llamó la atención de la intervención de Stewart en dicho podcast es su intranquilidad para expresar su opinión sobre la categoría.

«Tengo una opinión muy fuerte al respecto. Dije esto en Bristol en el programa previo a la carrera y se discutió sobre la saga de Hendrick, sobre las penalizaciones, la pérdida de puntos y la suspensión de los jefes de equipo. Luego ganaron la apelación, y la semana siguiente, dos autos más fueron penalizados. Se cortó un tornillo del parabrisas y perdieron todos esos puntos nuevamente por un tornillo del parabrisas que se salió.

Esta es la parte que realmente odio del deporte en este momento, y esto es lo que me frustra sobre NASCAR en este momento. Sí, tengo una opinión. Tengo una opinión muy fuerte sobre cómo están haciendo las cosas. Pero si digo algo, como propietario, entonces me va a costar dinero, me va a costar puntos, va a perjudicar a mis pilotos, va a perjudicar a mi organización. Así que, por más que tenga una opinión, tengo miedo de expresarla porque NASCAR ha demostrado ahora que no puedes tener una opinión. Puedes tener una opinión, pero básicamente la moraleja de la historia es que mantengas la boca cerrada. Así que déjame decirlo, y no quiero que respondas porque una cosa que queremos recordar a todos es que eres propietario de NASCAR y creo que todos perdemos de vista eso.» – Tony Stewart

Recientemente Tony Stewart se fue embarcando como piloto de NHRA, el campeonato de carrera dragsters, para competir en la clase Top Alcohol, mientras este año pasó ocupar el asiento de su esposa Leah Pruett en la clase Top Fuel. Aun así, Stewart no estaba totalmente desacantado de la NASCAR y una muestra fue cuando sus emociones al ver la victoria y título de la NASCAR Xfinity de su piloto Cole Custer en Phoenix.

Después de una temporada sin victorias, en la pretemporada de 2024, Tony Stewart mostró su optimismo por la temporada, pero también se puso a la defensiva diciendo que él les da a sus empleados las herramientas y que estaba cansado de tener la culpa de que sus autos no tengan buen rendimiento, ya que no es el jefe de mecánico ni el ingeniero, aún cuando el equipo es de su propiedad y lleva su apellido. A tono con la postura de Stewart, el equipo cambió su logo y dejo frases motivacionales como el post del 6 de enero de «Audaces e intransigentes. Somos quienes somos y no nos disculpamos por ello. Si no te gusta, no nos molesta». Pero esta publicación envejeció muy mal casi cinco meses después con el anuncio del cierre del equipo.

Ahora más de 300 empleados tendrán que buscar un nuevo empleo, mientras que los pilotos Chase Briscoe, Josh Berry, Noah Gragson, Ryan Preece, Cole Custer y Riley Herbst son agentes libres para 2025, así como sus 4 chárters a la venta. Stewart-Haas Racing ha sufrido un declive en los últimos tres años, al igual que cualquier relación humana, necesita cuidado y atención para perdurar en el tiempo. Si no ocurre eso, muere la relación, así como ocurrió con Stewart-Haas.

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