Dos carreras icónicas tomaron lugar el día de ayer, primero con el aniversario 90 del Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1. Para posteriormente pasar a la edición 103 de las 500 millas de Indianápolis por el lado de IndyCar.
En las calles del principado ganó Lewis Hamilton por tercera vez en una carrera emocionante, pero que cuando uno la mira detenidamente y lo piensa con el pasar de las horas, no fue la gran carrera.
Mercedes apostó con una estrategia agresiva de una parada en donde el inglés corrió con neumáticos medios por 68 vueltas, cuando su vida útil era de 50 vueltas aproximadamente. Esto no le gustó a Hamilton, quien en al menos de dos ocasiones pidió entrar en los pits para recibir un no de respuesta. “Shut up and drive” dicen, solamente que aquí si hubieron buenos resultados.
Max Verstappen fue el gran protagonistas de la carrera, el holandés “luchó por la victoria” de la carrera frente a Hamilton, no obstante, una sanción de cinco segundos por “unsafe release” que condiciono su carrera y una potencial victoria en Monte Carlo. El trazado del principado es poco amigable para los sobrepasos por lo que elementos como la largada y la estrategia toman un rol fundamental para esta carrera.
Con dos vueltas para el final, Verstappen hizo su zarpazo en la chicana sin éxito, aún así fue una gran carrera para él, Red Bull y Honda. Pero que a la larga terminó siendo un bonito esfuerzo, pero en vano porque del segundo lugar pasó a cuarto. Al menos sirvió para mostrar el gran potencial del RB14 y Honda, cuya evolución es un progreso en alza.
Muchos comparan lo hecho por Hamilton con lo que hizo Senna en 1992 cuando ganó la carrera con un auto inferior frente al poderoso Williams FW14 de Nigel Mansell, con unas vueltas finales peleadas, donde el britanico hizo todo lo posible para superar al brasileño.
Primero que todo son situaciones complejas, se pueden comparar, pero tampoco pueden estar en un mismo nivel. No niego que lo que hizo Hamilton fue espectacular, pero no es lo mismo a lo que hizo Senna.
Y todo eso yace en el contexto. En 1992, Senna tuvo que luchar de principio a fin para ganar esa carrera, tuvo suerte con el problema de Mansell que le regaló el liderato en las vueltas finales, pero Senna estaba con neumáticos gastados que según él “era como manejar en hielo” y con los cuales tuvo que defender su liderato a como diera lugar, siendo el único recurso que tenía a la mano era el manejo defensivo.
Aunque Hamilton y Verstappen lucharon durante el 90% de la carrera, el gran historia detrás era si Verstappen iba a poder superar al inglés, hacer la ventaja de cinco segundos para zafar de la sanción y así poder mantener la victoria.
Luego vino la otra gran historia de la carrera que fue los de los neumáticos de Hamilton, el cual se vió reflejado en la parte delantera de su W10 y por sus mensajes de radio. A pesar de todo, su auto tenía mejor tracción a la salida de las curvas y eso lo mantuvo por delante de Verstappen.
Independiente de lo que haya pasado en carrera, Hamilton sigue siendo el que tiene el mejor auto con el mejor equipo, como solía decir Mark Donohue para referirse a esa pequeña ventaja que buscaba tener por sobre el resto; “la ventaja injusta”.
Simon Pagenaud se convirtió en el primer francés en ganar las 500 millas de Indianápolis después de 99 años desde la victoria de su contertulio Louis Chevrolet, el hermano chico del fundador de Chevrolet.
Pagenaud fue el gran dominante de la carrera tras largar desde la pole position, liderando un total de 116 vueltas de las 200 estipuladas. A pesar de haber liderado la mayor cantidad de vueltas, el francés tuvo que luchar con uñas y dientes por la victoria, no solo en las vueltas finales, sino que a lo largo de la carrera con el consumo de combustible y con su gran rival en pista el piloto del Andretti Autosport, Alexander Rossi.
Nuevamente Rossi se llevó las miradas con su atrevido estilo de conducción para superar autos y que a la larga lo tuvo luchando por la victoria en las últimas diez vueltas de carrera.
A BRILLIANT MOVE by @AlexanderRossi, taking it all the way to the grass to pass!
Things are getting dicey in the #Indy500 on @NBC. Stream here: https://t.co/iiagfm2TqY #MustBeMay pic.twitter.com/GlZwA5mOse
— IndyCar on NBC (@IndyCaronNBC) 26 de mayo de 2019
Para los que vimos la carrera fue mucho mejor a lo que se vió el año pasado en lo que fue la prueba de fuego del aerokit universal. Este domingo debutaron las actualizaciones no radicales del aerokit que marcaron la diferencia por lo visto en pista que con complicidad a las condiciones climáticas (nublado con temperaturas frescas) fueron la receta perfecta para una carrera altamente competitiva. Lo cual deja un buen augurio para lo que será la carrera en Texas, el segundo óvalo del calendario.
Relive @SimonPagenaud‘s winning move.
With a lap and a quarter to go, Pagenaud got by Alexander Rossi to score the victory in the Greatest Spectacle in Racing. Watch post-race coverage on @NBC: https://t.co/iiagfm2TqY #MustBeMay #Indy500 pic.twitter.com/wKRvO1uvwj
— IndyCar on NBC (@IndyCaronNBC) 26 de mayo de 2019
Con esta victoria Simon Pagenaud aseguró su futuro en Penske, literalmente hablando, Roger Penske contó a los medios post carrera que el francés estará en uno de sus autos en 2020. Y la palabra del capitán es de confiar.
Antes de empezar el mes de mayo, el puesto de Pagenaud dentro de Penske estaba en la silla caliente, aunque no había nada explícito, los rumores señalaban que él podría ser reemplazado por Alexander Rossi o Fernando Alonso para 2020. Pero con su victoria en el Indy GP a inicios de mes y ahora la Indy 500, el futuro del francés sigue seguro dentro del equipo.
Aunque yo no descartaría del todo su llegada a Penske en 2020, las opciones para que corra dentro del equipo. O sacan a otro piloto u Penske añade otro auto dentro del equipo, el tiempo dirá. Ya de adelanto la “Silly Season” de IndyCar para el próximo año va a estar buena.
La edición de este año fue la primera a cargo de NBC, el canal que salvó Brooklyn 99, invirtió tiempo y recursos en promocionar la categoría de forma destacada, haciendo cross promotion entre sus diferentes plataformas.
Ví la transmisión de NBC y la calidad en cuanto a lo hecho por ABC es muy superior, partiendo desde la previa que dio inicio a una transmisión maratónica de casi ocho horas entre NBCSN (canal de cable) y NBC. Algo poco visto para los eventos deportivos.
La sinergia entre Leigh Diffey, Townsend Bell y Paul Tracy en la cabina de transmisión es una de las mejores que he visto en cuanto a la transmisión de un evento de automovilismo. Danica Patrick hizo su regreso a Indy para ser analista junto a Dale Earnhardt Jr y el anfitrión de toda la transmisión Mike Tirico.
Desde mañana Simon Pagenaud estará viajando por todo Estados Unidos hablando sobre victoria en Indy, es muy probable…más bien es casi un hecho que hará apariciones en The Today Show y The Tonight Show With Jimmy Fallon, dos de los programas más vistos de NBC.
IndyCar sigue en alza y gracias a NBC pueden llegar al siguiente nivel como los viejos tiempos antes de la infame “guerra civil” que causó tanto daño en IndyCar a mediado de los años 90s.
Como dice Ice Cube “fue un buen día” para ver carreras.