Black Lives Matters, tres palabras con un mensaje simple y claro, de que las vidas de la gente de color importan al mismo nivel que la mía como hombre blanco, chileno y latino que soy.
Pero en estos momentos para que la vida de alguien de color tenga el mismo valor, es necesario de que tenga que estar en la primera plana para la sociedad pueda comprender de que su vida también importa y hayan los cambios necesarios.
Desde que volvió la Fórmula 1 tras el forzado parón por la pandemia mundial del COVID-19 que Lewis Hamilton ha tomado la batuta sobre la lucha racial y ha utilizado su plataforma para expresar su descontentos y criticas hacia la labor hecha por la FIA y la categoría en cuanto a una mayor diversidad.
No se puede negar de que desde sus inicios la Fórmula 1 ha sido un deporte cuya mayoría racial es blanca. Cuando Hamilton llegó a la categoría en 2007 se convirtió en el primer piloto de color en competir y en tan solo el segundo en manejar un Fórmula 1 desde Willy T Ribbs a mediados de los 80s.
Han pasado 13 años desde su debut con múltiples campeonatos mundiales de por medio y Hamilton es el rostro mediático de la Fórmula 1. ¿Hubo pasividad en el pasado para el enfrentar el problema? puede que si porque cuando uno crece toma compromisos y entiende como son las cosas. Por el otro lado, al igual que a NASCAR, el problema les explotó en la cara y ahora mientras recogen las piezas están reaccionando.
Las respuestas por parte de Fórmula 1 con las ceremonias hechas antes de la largada me recuerda mucho a lo que hacen las grandes compañías para el mes de orgullo al añadir un arcoíris al logo para hacerlo pasar como Gay Friendly, pero aún así cometen malas prácticas hacía la comunidad LGBT con actos de discriminación, falta de mea culpa.
Las marcas luchan por ser la más progresiva del mercado, mientras en la otra vereda tenemos a partes de la sociedad que luchan por ser la más racista del mundo y eso se ha visto con los políticos y en la Internet.
Alexis Ohanian, uno de los fundadores de Reddit y esposo de Serena Williams cree haber encontrado la solución al racismo al estar casado con una mujer de color y renunciando a su puesto dentro del a directiva de la página web e incitando a la mesa directiva de que su reemplazado sea alguien de color.
“El racismo ya era una pandemia global antes del coronavirus”. – Spike Lee, director de cine
En estos tiempo ha quedado más que claro de que las acciones valen más que las palabras, pero si no hay un mea culpa de fondo, no sirven mucho y pasan a ser una solución parche y eso se ha visto en Fórmula 1, NASCAR, Hollywood, Reddit, las grandes compañías y en la sociedad.
Lewis Hamilton es un privilegiado de trabajar en lo mejor que sabe hacer, de ganar un millonario salario, además de ser una figura global que trasciende las fronteras. No obstante, él no nació con ese lujo. El argumento del privilegio es lo que más le sacan en cara al piloto cada vez que habla sobre este tipo de causas, como si fuera su gran pero de la hipocresía.
Antes de redactar este artículo leí en Twitter de que él tuvo el privilegio de haber nacido en Gran Bretaña, centro de la Fórmula 1. ¿De que te sirve ser británico? si, nació en el país donde se creó la Fórmula 1, pero también es el mismo país donde fue atacado, molestado, insultado y visto de menor por ser alguien de color. Que privilegio más inútil…
Uno de los grandes privilegios que tuvo fue el de haber recibido la confianza de Ron Dennis cuando tenía tan solo 12 años para ser parte del programa de pilotos de McLaren, el cual estuvo con él desde su paso por el Karting hasta llegar a la Fórmula 1 en 2007 y logrando su primer campeonato del mundo al año siguiente.
Es una lucha constante, habrán cambios, pero el gran cambio ocurrirá en los próximos años tras una transición generacional. Esto mismo esta viviendo NASCAR tras prohibir la bandera confederada, el gran símbolo de la fanaticada hardcore de la categoría de autos stock.
Al final del día el querer una sociedad mejor, más justa, más diversa es una buena lucha que tomar y apoyar porque esos cambios nos afectaran de algún modo por las próximas décadas como lo está haciendo Lewis Hamilton ahora mismo en Fórmula 1.