Gene Haas es un hombre acostumbrado a la controversia tras haber pasado año y medio en prisión por evasión de impuestos a inicios del 2008, siendo liberado a solo meses de formar el Stewart Haas Racing con el entonces dos veces campeón de la serie mayor de NASCAR Tony Stewart.
Actualmente su equipo de Fórmula 1 ha estado en el ojo del huracán por el actuar de su más reciente piloto, el ruso Nikita Mazepin quien subió a sus redes sociales un video en donde acosaba sexualmente a una mujer a bordo de un auto. En solo horas, el equipo comentó de que no condonaba sus acciones, pero si encontró aberrante de que haya subido el vídeo.
La situación fue revisada de forma interna por parte del equipo y la FIA. Recientemente se confirmó al piloto ruso para la temporada 2021 como compañero de equipo del campeón 2020 de la Fórmula 2 Mick Schumacher. Siete años antes Haas enfrento una situación similar y complicada con uno de sus pilotos en NASCAR.
Gene Haas logró firmar al piloto que siempre quiso como fue Kurt Busch, el campeón 2004 de NASCAR y ácido rival de Stewart en la pista, cuando el empresario anunció sus planes de firmar al piloto de Las Vegas “Smoke” no estaba del todo contento, pero tuvo que aceptar a la larga porque Gene ponía la plata y la persona que iba a financiar ese cuarto auto dentro del equipo.
Embed from Getty ImagesKurt Busch siempre ha sido alguien temperamental y lleno de controversias como lo ocurrido en la recta final de la temporada 2005 que le terminó costando una salida anticipada de Roush Racing por manejo irresponsable en las calles de Phoenix. Se sospechó de que Busch estaba bajo la influencia del alcohol, pero un defectuoso alcotest nunca pudo probar dichas afirmaciones.
Ya con Penske Racing, Busch tuvo su recordada rivalidad con Tony Stewart donde ambos se eliminaron de la Daytona 500 del 2007 cuando eran los claros favoritos por la victoria y para muchos una de las mejores chances que tuvo Stewart de ganar “la gran carrera americana”.
Llegando al final de temporada del 2011, Busch tuvo una carrera para el olvido que duro casi nada debido a un fallo en la transmisión de su Dodge Charger. Irónicamente, una pieza rota impactó el auto de Stewart, la cual de milagro no destruyó el radiador y que fue la detonante de una épica remontada para que “Smoke” lograse su tercer campeonato y el primero para Stewart Hass Racing.
Entrando a los garajes, Busch hizo un gesto obsceno con el dedo medio que para muchos iba dirigido hacía Michelle Obama, la entonces primera dama de los Estados Unidos quien la invitada de honor para esa carrera en Homestead. En tanto que el piloto dijo que el gesto iba dirigido para sus mecánicos.
Mientras la carrera estaba en marcha, Busch estalló y cortó una entrevista con ESPN antes de iniciarse, el exabrupto fue grabado por un fan, el cual se viralizó por Internet, llegando a manos de NASCAR, los cuales multaron al piloto con 50.000 dólares y le terminó costando su lugar dentro de Penske tras la presión de varios auspiciadores.
Con todos los asientos definidos para 2012, Busch firmó con Phoenix Racing, un equipo chico creado por James Finch y que competía en NASCAR desde la década de los 90s y que en los años 2000s corrían a tiempo completo o haciendo Start and Park como forma de reunir fondos y así poder correr semana a semana.
2012 fue una temporada complicada para Busch con un equipo y auto que no daban para mucho, aún así logró un tercer lugar en el circuito de Sonoma. Mientras que en otras ocasiones terminaba en el muro, a los gritos por la radio o envuelto en incidentes en los pits como ocurrió en Darlington. Sus exabruptos por la radio eran populares por redes sociales, ganándose el apodo de Radio Sweetheart por parte del ex piloto y antiguo némesis Jimmy Spencer.
En medio de todo esto, Busch recibió una suspensión por parte de NASCAR por insultar a un periodista tras correr una carrera de la Xfinity Series en Dover que le hizo perderse el fin de semana en Pocono. El piloto regresó a la semana siguiente tras recibir el apoyo por parte de los integrantes del equipo mediante una votación interna que definió su continuidad.
Además que para una de las carreras de Talladega corrió con una decoración tributo a Talladega Nights: The Ballad of Ricky Bobby y el recordado auto “Me” que tenía un puma en el capo llamado Karen que mostraba el renacer del personaje interpretado por Ferrell tras un accidente que lo tuvo corriendo en ropa interior y pidiendo ayuda a Tom Cruise con sus poderes de brujeria.
Embed from Getty ImagesBusch abandonó Phoenix Racing tras la carrera de otoño de Talladega para terminar la temporada 2013 con Furniture Row Racing y correr la siguiente temporada con el equipo de Colorado hasta su llegada a Stewart Haas Racing para 2014.
Una persona que siguió todo el proceso de procesión de Busch y que logró concretar el poder correr con esa recordada decoración fue su entonces novia Patricia Driscoll, ambos se conocieron en 2011 durante un evento para recaudar fondos a beneficio de los veteranos de guerra estadounidenses. Desde 2003 que Driscoll trabajaba para la Armed Forces Foundation, una fundación que ayudaba a veteranos de guerra donde se promovía la salud física y mental de ex soldado mediante diferentes actividades como la caza, además de brindar apoyo económico a sus familias.
Embed from Getty ImagesDentro de la fundación, Driscoll trabajaba en la recaudación de fondos y era participe activa de eventos, de los cuales varios que involucraban a NASCAR, un activo participantes en pos de los veteranos como se puede ver de forma constante en las carreras.
La suspensión
A solo 48 horas de la Daytona 500 del 2015 NASCAR anunció que Busch había sido suspendido por acusaciones de violencia domestica hacía Driscoll, las cuales habrían ocurrido en septiembre del 2014 dentro del Dover Speedway cuando el piloto tomó a su ex novia del cuello para azotarla contra el muro del Motorhome, lo que le produjo múltiples moretones en su rostro y cuello.
La historia se remonta a septiembre del 2014 entre las carreras de los Playoffs de New Hampshire y Dover donde Busch terminó su relación con Driscoll en medio de un exabrupto, gritos, insultos y con él siendo abandonado en medio del camino. Una semana después, ella se contactó con el piloto para saber su bienestar mental y viajo al óvalo de Delaware para verlo porqué estaba preocupada.
Según ella contó a Think Progress, llegó al Paddock del óvalo para hablar con él y enmendar la relación, pero lo encontró dentro de su Motorhome desnudo. Cuando entró, Busch reaccionó mal, iniciando una discusión que terminó con el ataque físico.
Conversación por mensajes entre Driscoll y Busch
- Busch: Como estas. Espero que estés bien.
- Driscoll: Estoy llorando en el suelo. Terminé de ver Siete años en el Tíbet. No se cual es el camino, pero por alguna razón tu me confundes más y tu timing es impecable.
- Busch: Te amo.
- Driscoll: Lo se, pero no se si yo te quiero. Ahora mismo no te quiero. El mundo esta encima mío.
- Busch: Estoy lastimado por ti y estoy aquí para lo que necesites. El mundo parece como si se estuviera cayendo a pedazos alrededor tuyo. Vas a salir adelante.
Driscoll no hizo la denuncia de forma inmediata dado que estaba en medio de una lucha legal por la custodia de su hijo de nueve años y en la que Busch la había apoyado de forma vehemente en la audiencias. Si se hacía publico, el daño iba a afectar a los dos por igual por lo que busco la salida “pacifica” con la mediación de amigos en común.
A finales de octubre en un Starbucks de Maryland, se encontró con uno de los encargados de prensa de Busch, quien le advirtió de que si seguía con el proceso legal las cosas no iban a terminar bien para ella. El apriete fue suficiente para que Driscoll hiciera la denuncia contra el piloto y buscase una orden de alejamiento. Como acto de gentileza, ella le dio el aviso a NASCAR de que iba a denunciar a campeón 2004 de la serie mayor.
“Dada la gravedad de los hallazgos y conclusiones hechas por el Comisionado de la Corte de la Familia del Estado de Delaware, NASCAR ha suspendido indefinidamente al piloto Kurt Busch, de forma inmediata. Él no podrá correr o participar en actividades de NASCAR hasta nuevo aviso. Kurt Busch y su equipo del Stewart Haas Racing están bien informados de nuestra posición y del porque fue hecha. Nosotros continuaremos respetando el proceso y agenda de las autoridades involucradas”. – Comunicado de NASCAR (20/02/2015)
El propio Haas y Joe Custer, entonces presidente del Stewart Haas Racing salieron a apoyar a Busch de manera inmediata y pública. Sin embargo, nadie del equipo había hablado con Driscoll para saber su versión de los hechos.
Driscoll recibió la orden de alejamiento por parte de la Corte de la Familia del Estado de Delaware, en tanto que el comisionado David Jones determinó de que la evidencia en la denuncia mostraba un ataque físico hecho por Busch hacía ella. Sin embargo hasta el momento de la suspensión, el piloto no tenía cargos crimínales.
Busch anunció de que iba a apelar la sanción de NASCAR, Chevrolet suspendió su relación comercial y Driscoll publicó un comunicado de prensa en donde aplaudió el accionar del ente rector de autos stock. No obstante, no consideraba la suspensión como una victoria.
“Mi única esperanza es que el dolor y trauma que sufrí a lo largo de este proceso pueda ayudar a otras victimas a encontrar su voz. Desafortunadamente vivimos en una cultura donde historias como la mía son metidas bajo la alfombra debido al miedo y con el conocimiento de que cada persona que muestra empatía habrán muchos más que buscarán desacreditar a la victima. Ya resulta suficientemente lamentable soportar el abuso físico, sino que también los ataques verbales que vienen cuando la victima habla y que son igual de doloroso”. – Patricia Driscoll
El campeón 2004 de la serie mayor se convirtió en el primer piloto en la historia de NASCAR en recibir una suspensión por violencia domestica y fue reemplazado por Regan Smith, el cual llegó al garage del equipo con rayados escrito por fanáticos haciendo referencia a Ray Rice, jugador de la NFL que atacó a su pareja y cuyo video se viralizó poniendo fin a su carrera como jugador de los Baltimore Ravens.
Busch apeló la suspensión de NASCAR para poder correr la Daytona 500, pero perdió y quedó suspendido de manera indefinida, mientras que el ente rector preparaba los lineamientos a seguir para que el piloto de Las Vegas pudiera regresar a las pistas en algún punto de la temporada.
Tres semanas después NASCAR levantó la suspensión de Busch, el cual aún insistía en su inocencia. Días atrás el Fiscal General del Estado de Delaware anunció de que el piloto no iba a enfrentar cargos criminales por falta de evidencias.
Pocket Commando
A solo semanas del inicio de la temporada 2015 de NASCAR, Busch estaba en el estrado de una corte en Delware para decidir si aplicar o no la orden de restricción en su contra. Fue ahí que salieron más detalles de la relación y datos inusuales sobre el pasado de la otrora ex novia del piloto, como también la viralización de un video llamado “Pocket Commando”.
El vídeo fue subido a YouTube y era un piloto para que Driscoll fuera parte de un Reality Show en donde habló de su amor por la patria, las armas, pasarlo bien y el sexo. El vídeo en cuestión fue bajado en solo días, pero el autor de este artículo lo vio en su momento y quedó anonadado.
En menos de cinco minutos se pudo ver a Driscoll disparando armas de guerra y siendo parte de un entrenamiento militar tipo Guerrilla. El vídeo fue utilizado por Busch como evidencia para mostrar a su ex novia como una persona sanguinaria, argumentando de que ella es una “asesina entrenada” y que trabajo como mercenaria de guerra y sicaria experta en matar narcotraficantes.
Durante las audiencias, Busch contó que Driscoll le mostró fotos de sus victimas ya fallecidas de un balazo en la cabeza, como también de una noche en la que salió y regresó a casa llevando un abrigo ensangrentado. Los rumores eran conocidos dentro del Paddock de NASCAR, siendo los integrantes del equipo #41 “los voceros oficiales”. Busch argumentaba de que ella quería arruinarlo dentro y fuera de la pista con rumores sobre alcoholismo y violencia intrafamiliar.
La caída de Patricia
Embed from Getty ImagesTan pronto hizo la denuncia, su nombre se hizo público, pasando de víctima a blanco de amenazas en línea, mientras que el abogado de Busch decía a los medios de que ella era una mentirosa, de que “las acusaciones son completamente fabricadas por una mujer que se rehúsa a aceptar el fin de la relación con el Sr.Busch”.
Ya en marzo del 2015, Busch quedó libre de cargos y estaba de regreso a las pistas como piloto del auto #41, mientras que ESPN empezó a investigar el pasado de Driscoll al mando de la fundación, sacando a la luz múltiples irregularidades económicas en donde ella usaba los fondos de la fundación para gastos personales como viajes, joyas, cuentas y alfombras. Acto seguido se supo que un ex trabajador iba a cooperar con las autoridades, forzando a la renuncia de Driscoll al mando de la Armed Force Foundation.
A finales del 2016 fue procesada por ocho cargos federales, entre ellos malversación de fondos, fraude y evasión de impuestos. Para cuando empezó a ser procesada la fundación había cesado sus actividades meses atrás.
En febrero del 2017, su ex novio ganó la Daytona 500 con un sobrepaso en la última vuelta para darle al Stewart Haas Racing su primer Harley J. Earl Trophy. Ya en Victory Lane, Busch al borde de las lagrimas habló sobre lo especial que era ganar la carrera más importante de NASCAR y agradeció a su segunda esposa, Ashley por hacerlo “un mejor hombre”.
Embed from Getty ImagesEn noviembre del 2018, Driscoll fue declarada culpable por cuatro delitos federales y fraude en primer grado, siendo condenada a una año de prisión, además de regresar más de medio millón de dólares por los delitos cometidos entre los años 2013 y 2014.
Ella junto a su equipo legal mantuvieron su inocencia y de que los reclamos sobre las irregularidades ya habían sido aclarados después de una auditoria independiente hecha en 2012. Años después en un reportaje , Driscoll contó de que se siente arrepentida de haber hecho la denuncia contra Busch por todas las implicancias que iba a tener posteriormente en el mediano plazo.
“Te lo digo, es mejor aguantar la paliza ese día y mantener la boca cerrada que por cualquier cosa que haya sucedido después. No vale la pena en absoluto. Debería haberme quedado callada”. – Patricia Driscoll