Jeff Gordon y la Fórmula 1

Jeff Gordon es uno de los pilotos más reconocidos en el automovilismo mundial y una de las personas claves en el auge que tuvo NASCAR durante la década de los 90s. El oriundo de California tenía talento, buena apariencia, carisma, juventud que lo hicieron una figura mediática que iba más allá de las carreras. No obstante, la figura de Gordon pudo haber llegado a nivel de superestrella si él hubiera terminado corriendo en monoplazas.

Desde la década de los 80s que el nombre de Gordon que estaba sonando con fuerza dentro de la escena motorsport en los Estados Unidos, cuando con menos de diez años estaba ganando múltiples carreras en Midgets para luego ascender a USAC y competir en los Sprint Cars, logrando los campeonatos nacionales de Midgets y la Silver Crown en 1990 y 1991.

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Para ese entonces, él y su familia estaban viviendo en Indiana porqué el objetivo principal era correr en IndyCar por lo que seguir la ruta para llegar a la categoría mediante las pistas de tierra no era algo alocado, ya que por años había sido el semillero de la categorías con pilotos como AJ Foyt, Al Unser Sr, Bobby Unser, Mario Andretti dando sus primeros pasos antes de llegar al Speedway.

Tras lograr esos campeonatos, el siguiente paso era correr en monoplazas para llegar a IndyCar, pero la falta de presupuesto terminó matando ese sueño cuando ni siquiera había empezado. Más adelante el apabullante éxito de Gordon en NASCAR y el hecho de que nunca tuviera una oportunidad en IndyCar junto a otros factores llevaron a que Tony George fundara la Indy Racing League en 1994 dando inicio a la infame guerra civil de 12 años entre el IMS y CART.

Con IndyCar fuera del mapa, Gordon cambió el rumbo y viajo al sur, a Carolina del Norte para ser parte de la escuela de manejo de Buck Baker y así aprender lo básico sobre correr con autos stock. En 1990 debutó en la serie Busch y al año siguiente ganó los honores de novato del año para dar el salto a la serie mayor en 1992 con Hendrick Motorsports.

En 1994 ganó su primera carrera en la Winston Cup en Charlotte con la Cola Cola 600, el piloto del #24 llegó a Victory Lane llorando de la emoción. Meses después hizo historia al ganar la edición inaugural de la Brickyard 400, la primera carrera de Stock Cars que se disputó en el Indianapolis Motor Speedway, logrando sacarse en parte la espina de no haber podido participar en las 500 millas de Indianápolis.

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En 1995 logró su primer campeonato con los “Guerreros del Arcoíris” tras vencer en una reñida definición a Dale Earnhardt Sr en Atlanta. En 1997 ganó su primera Daytona 500 y el segundo campeonato que lo empezó a poner en la mira de todos aquellos no familiarizados en NASCAR y con ello la opción de correr en Fórmula 1 empezó a tomar forma. Sin embargo, el primero en tratar de convencerlo fue Sir Jackie Stewart en 1990 con una conversación telefónica para llevarlo a competir en la F3000 o Fórmula 3 Britanica.

“Traté de que Jeff Gordon manejara uno de nuestros autos del Paul Stewart Racing. Hablé con él cuando estaba viviendo aquí (en Indianápolis), lo llamé una vez y le dije, ‘¿tú vendrías?” Estábamos teniendo problemas en conseguir un auspiciador estadounidense. Debo haber sido el primero a nivel internacional en ver un potencial en él y me hubiese encantado tenerlo, pero nunca paso porque no hubo una compañía estadounidense dispuesta a pagar los $ 100.000 dólares en auspicio para mandar a Gordon a Europa”. – Sir Jackie Stewart, febrero de 1999

Todo empezó a mediados de 1997 cuando gente del equipo Williams visitó a Gordon en el Pocono Raceway durante el fin de semana de la carrera de la serie mayor en el triovalo de Pensilvania. “Me gusta la Winston Cup, me encanta manejar para Rick Hendrick, y estoy en un gran momento aquí (en NASCAR) y estoy contento haciendo dinero. No tengo quejas, tengo grandes auspiciadores. Así que, a menos que algo cambie, no se porque querría seguir ese camino ” contó Gordon al día siguiente.

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Pese al desinterés inicial, Fórmula 1 siguió tocando a su puerta y esta vez con los ejecutivos de Ford buscando traerlo al equipo Stewart, el cual usaba los motores de la marca azul en ese entonces. Williams tampoco se rindió e intentaron nuevamente en 1998. El equipo británico estaba buscando renovarse tras el campeonato de 1997 y la perdida de los motores Renault. Para mediados del 98′ se sabía que Jacques Villeneuve no iba a continuar dentro del equipo tras haber firmado por British American Racing para 1999, a su vez, Sir Frank Williams estaba buscando traer de regreso a Alex Zanardi, el italiano estaba en medio de una defensa de su campeonato de CART cuando comenzaron las tratativas.

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En el caso de Gordon, las discusiones con Williams partieron nuevamente durante el invierno norteamericano como confirmó a la prensa Jimmy Johnson, la persona que en 1992 selló el acuerdo para que Gordon corriera para el equipo de Rick Hendrick en la serie mayor de NASCAR. Con 26 años ya era doble campeón de la Winston Cup y uno de los pilotos más millonarios del automovilismo con ingresos que llegaban a los 40 millones de dólares, en parte por publicidad y venta de merchardising.

En agosto del 98′ Gordon confirmó de que habían conversaciones con Williams y BAR, pero que no había firmado nada, aunque si quería una chance de probar un Fórmula 1 en algún momento. Según GrandPrix.com, el piloto del Hendrick Motorsports podría tener una prueba durante el otoño y así dar inicio a su salto a los monoplazas para estar corriendo a tiempo completo en el 2000, año en el cual la Fórmula 1 iba a volver a los Estados Unidos con el gran premio tomando lugar en el Indianapolis Motor Speedway.

Con el tercer campeonato de la serie mayor conseguido en menos de diez años de carrera dentro de NASCAR, Fórmula 1 nuevamente llamó a su puerta, esta vez con BAR y Craig Pollock, el agente de Jacques Villeneuve y una de las personas a cargo del equipo, además de haber sido participe clave en las negociaciones de la adquisición del equipo Tyrrell de parte de British American Tobbaco en 1997.

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Hablando con The Chicago Tribune en 2004, Gordon reveló que las conversaciones con BAR partieron en el 97′ y con la propuesta de hacer dos años en CART con el equipo KOOL Green (ambas eran auspiciadas por marcas de cigarros propiedad de BAT) ver si estaba apto para correr en monoplazas y ahí iniciar un programa de pruebas con el equipo para recién ver si podría llegar a Fórmula 1.

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“En ese entonces ya tenía dos campeonatos de la Winston Cup. Le dije a la gente de BAR que estaba ya asentado aquí (en NASCAR). Estaba con el mejor equipo, con los mejores auspiciadores. Aquí tenía todo lo que podía pedir. Hubiera sido un retroceso para mi hacer eso sin las garantías de saber donde me podría llevar”. – Jeff Gordon, junio del 2003

Finalmente, Gordon tuvo su chance de manejar un F1 durante un evento publicitario que tomó lugar en IMS con Juan Pablo Montoya en 2003. Gordon tuvo su primer gran acercamiento a bordo del FW24, mientras que Montoya tuvo su primera vez a bordo de un NASCAR, tres años antes de iniciar su carrera en autos stock.

El afamado periodista Nigel Roebuck estuvo presente en ese intercambio de autos y destacó como el equipo Williams se sorprendió con la facilidad que tuvo Gordon para adaptarse al auto y ser competitivo con tan pocas vueltas.

“Yo dije que Jeff iba a estar a un par de segundos detrás y él hizo mucho mejor que eso. Es una pena de que él no tuvo más tiempo en el auto. Estoy seguro que sería igual de competitivo como cualquiera en la F1”. – Juan Pablo Montoya, junio del 2003

Al año siguiente junto a su compañero de equipo Jimmie Johnson visitaron a Montoya para el GP de España en Barcelona. La carrera a tiempo completo de Gordon llegó a su fin en 2015, aunque en 2017 hizo algunas apariciones esporádicas a bordo del #88 de Dale Earnhardt Jr mientras se recuperaba de una conmoción cerebral. Actualmente es comentarista de las carreras de NASCAR para Fox Sports en los Estados Unidos.

¿Gordon hubiera tenido éxito en Fórmula 1? Muchos creen que si. No necesariamente daba para ser campeón del mundo, pero tampoco iba a dar pena en los últimos lugares. Si Jackie Stewart y Frank Williams conversaron con él para convencerlo es porque vieron algo, por más que su fuerte eran los autos stock. Gordon fue un piloto versátil desde sus inicios hasta el final de su carrera cuando ganó las 24 horas de Daytona en 2017 con Wayne Taylor Racing.

Gordon es un claro ejemplo del What If… ¿Que hubiera pasado? Si llegaba a IndyCar, tenía éxito y se convertía en la figura mediática más grande desde Mario Andretti y AJ Foyt. ¿Como eso hubiera cambiado el paradigma automovilístico dentro de los EEUU?

Un comentario sobre “Jeff Gordon y la Fórmula 1

  1. […] El caso símbolo de la generación perdida de pilotos fue Jeff Gordon. Nacido en California, a temprana edad se mudó a Indianápolis para competir en USAC y poder competir en la Indy 500. Habiendo ganado múltiples carreras y campeonatos, Gordon nunca pudo concretar ese objetivo por cuestiones económicas que lo alejaron de la chance de al menos probar un monoplaza y que lo terminó llevando al sur de los Estados Unidos para correr en NASCAR a partir de 1990, debutando en la serie mayor en 1992, ganando la primera edición de la Brickyard 400 en Indy en 1994 y logrando su primer campeonato de la serie mayor en 1995. […]

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