Los 80s en Chile se pueden definir con un puñado de palabras: dictadura, DD.HH, neoliberalismo, Chicago Boys, auge, caída, FPMR, crisis y muchas más, pero como este es un blog de automovilismo no me adentraré en el tema, no obstante; trataré de contextualizar este artículo de la forma más clara posible.
A inicios de esa década, Chile estaba en una suerte de burbuja, en donde el crecimiento económico era gigantesco, gracias a la paridad impuesta entre el peso y el dólar. (como Argentina en los 90s). Esto llevó en 1982 a una severa crisis económica que devaluó el peso chileno y llevó al aumento de la deuda externa. Esto incremento las cifras de desempleados y dio rienda suelta a la privatización de empresas nacionales como Lan (actualmente Latam Airlines) y Chilectra (actualmente ENEL).
Se gastaba en exceso mientras la deuda externa crecía silenciosamente y a pasos agigantados en complicidad de las políticas neoliberales de la época.
Durante esos años, Eliseo Salazar se convirtió en el primer chileno hasta la fecha en llegar a Fórmula 1, compitiendo en 24 Grandes Premios dentro de 37 participaciones. La Fórmula 1 en Chile durante los 80s era bien popular con los grandes premios siendo transmitido en vivo por TVN (Televisión Nacional de Chile), a pesar que los resultados no acompañaban del todo a Salazar.
En medio de este “boom”, el entonces presidente de la Federación Chilena de Automovilismo Deportivo (FADECH), Sergio Santander Fantini tuvo de idea de hacer un Gran Premio de Fórmula 1 en Chile, si en C-H-I-L-E!. Lo que era una utopía lejana, para Santander Fantini era algo que valía la pena intentar o al menos preguntar. La idea fue de albergar la carrera en el circuito de Las Vizcachas o incluso hacer un circuito callejero por las calles de Viña del Mar, otra utopía más.
El Autódromo de Las Vizcachas
Localizada en Puente Alto, el autódromo diseñado por Alberto Sartori y Mario Recordón, tenía una distancia original de 1.6 kilómetros y con el paso de los años aumentó a 4 kilómetros.
Por años Las Vizcachas fue el hogar de la Fórmula 3 chilena como también de un sinfín de categorías locales como el TC2000, Turismo Nacional. Convirtiéndose en la meca del automovilismo en Chile.
Como pista, Las Vizcachas vio altos y bajos. Desde la popularidad de la Fórmula 3 que atrajo a Chiletabacos y su abanico de marcas de cigarros, las cuales apoyaron a una variedad de equipos dentro de la categoría y en donde las carreras significaban altos ratings en una limitada TV chilena, donde cultura y deporte eran los componentes fundamentales de la programación.
La categoría de monoplazas chilena era altamente popular con carreras que se realizaban en bases militares y circuitos a lo largo del país.
Antes de que Salazar se convirtiera en el primer y único piloto chileno en Fórmula 1 hubo otro que tuvo sus chances y era el hijo del presidente de la Federación.

Santander hijo partió su carrera en Karting y autos turismo en su natal Arica junto a padre. Llegando a finales de la década de los 70s junto a Salazar fueron a Argentina a competir en la Fórmula 4, actualmente conocida como Fórmula Renault.
Salazar corrió tres temporadas en el país transandino y ganó el campeonato en 1978, mientras que Santander duró una sola temporada y se devolvió a Chile.
Santander hijo siempre pensó que era mejor piloto que Salazar, pero el gran problema era su padre, si el cupo iba para él, las acusaciones de nepotismo iban a ser inevitables. “Hagas lo que hagas, siempre van a decir que yo te beneficie a ti” recordó décadas después la viuda de Santander sobre una conversación que tuvo su esposo con su padre.
En 1987, Sergio Santander perdió la vida tras chocar con un poste durante una carrera de la Fórmula 3 chilena en Las Vizcachas. Tenía 33 años y con su trágica muerte, la popularidad de la categoría en Chile se difuminó.
Siguiendo con la trama principal, el traer la Fórmula 1 hasta el día de hoy cuesta millones de dólares, pero con la baja del dólar a inicios de los 80s, la FADECH logró que la FISA (Federación Internacional de Automovilismo Deportivo) pusiera sus ojos en Chile y que mandara a un emisario a inspeccionar el autódromo.
Derek Ongaro fue uno de los primeros integrantes de la FOCA (Formula One Constructors Association). Desde la década de los 70s era el inspector de circuitos de la FISA y partidor oficial de los Grandes Premios. Ongaro viajó a Chile a inspeccionar Las Vizcachas y de pasada visitó Viña del Mar. Esto hizo que gente de la Federación anunciara la posibilidad de que Chile fuera parte del calendario de la temporada 1983 de Fórmula 1.
“Ongaro mandó un informe oficial de la visita. Y decía que Las Vizcachas era una pista de nivel mundial.” – Pietro Morales, presidente de la FEDACH en ese entonces.
Pero la verdad era otra; Las Vizcachas era una pista que dejaba mucho que desear y si el proyecto iba en serio tendría que haber una gran inversión en cuanto a infraestructura, pero la crisis del 82′ golpeó a Chile con fuerza, matando las chances chilenas de albergar un Gran Premio, la carrera de Salazar en F1 y la idea de reformar Las Vizcachas quedaron en punto muerto.
Embed from Getty ImagesPersonalmente dudo que Ongaro haya redactado en el informe que Las Vizcachas era una pista “de nivel mundial”. Para muchos el británico se la pasó más turisteando en Chile que viendo a Las Vizcachas como un serio lugar para albergar un Gran Premio de Fórmula 1.
Con el paso de los años el legado de Santander Fantini quedó empañado tras ser uno de los principales involucrados en el escándalo relacionado a la elección de la sede de los JJ.OO de Invierno del 2002 cuando era presidente del Comité Olímpico Chileno y pasó sus últimos años viviendo en la miseria.
Ongaro siguió en su rol como inspector de circuitos de la FISA hasta 1986 siendo reemplazado por Roland Bruynseraede (Si usted vio Senna ese nombre le sonará familiar). Ongaro falleció en 1996 de un ataque al corazón.
Las Vizcachas cerró en 2006 debido a que un proyecto habitacional que se construiría cercano al autódromo. Sin embargo, en 2012 se trató de revivir el autódromo, pero sin mucho éxito y actualmente es usado cada cierto tiempo para eventos privados.
¿Y la Fórmula 1 en Chile?
Bueno…..cuando los cerdos puedan volar.
Por mientras tendremos que conformarnos con las vistas que hace Red Bull Racing cada cierta cantidad de años.
Embed from Getty Images
[…] el día de hoy esto sigue siendo un utopía, aunque se hizo “el intento” en los 80s y en los últimos años han habido más intentos de hacer crecer la cultura tuerca en Chile con la […]
[…] tener una carrera sancionada por la FIA y realizada por las calles de Santiago fue una utopía de muchos años hasta que finalmente Eliseo Salazar y el gobierno de la presidenta Michelle […]
[…] el día de hoy esto sigue siendo una utopía, aunque se hizo “el intento” en los 80s y en los últimos años ha habido más intentos de hacer crecer la cultura tuerca en Chile con la […]